
La depresión, como sabemos, es un trastorno del estado de ánimo que va más allá de la simple tristeza. Se trata de una experiencia compleja que afecta a la persona en todos los aspectos de su vida, incluyendo su temperamento.
La irritabilidad es uno de los síntomas más comunes de la depresión. Las personas que la padecen pueden experimentar una mayor impaciencia, facilidad para enfadarse y una notable sensibilidad ante situaciones cotidianas.

¿POR QUÉ SUCEDE ESTO?
Las causas de la irritabilidad en personas depresivas pueden ser por múltiples factores, incluyendo tanto aspectos orgánicos como psicológicos.
Entre algunas de sus posibles causas podemos encontrar:
▸ Desequilibrios Hormonales: Alteraciones en las hormonas, como el hipotiroidismo, pueden afectar el estado de ánimo y provocar irritabilidad.
▸ Estrés y Regulación Emocional: El estrés continuo y los problemas para regular las emociones pueden hacer que las personas respondan de manera exagerada ante situaciones cotidianas.
▸ Auto-exigencia Elevada: La presión que uno se impone puede generar frustración y, como resultado, irritabilidad.
Para manejarla de manera adecuada, es crucial identificar y abordar sus causas subyacentes.
La irritabilidad asociada a la depresión no tiene por qué ser una batalla sin fin. Buscar ayuda profesional, realizar terapia, implementar cambios en el estilo de vida y practicar técnicas de manejo del estrés son herramientas que pueden ayudarte a recuperar el bienestar emocional.
También, es importante recordar que la irritabilidad es solo uno de los muchos síntomas de la depresión y que cada persona puede experimentarla de manera diferente. Abordar este síntoma con comprensión y cuidado es esencial para el proceso de recuperación.
